Según mi librito de Comunicación, el problema que se plantea acerca del cuento de nuestro amigo Tabucchi es el siguiente: "¿Qué relación hay entre el personaje griego literario y su adaptación al cuento moderno? ¿Qué elementos del original se mantienen? ¿Cómo se reinterpretan e insertan en un nuevo mundo narrativo?"
Para poder fundamentar cualquier hipótesis, comenzaré con una afirmación basada en lo que he leído y entendido:
Lo que se propone en el cuento es una humanización de los clásicos personajes griegos.
Lo podemos ver en Dédalo, que pasa de ser un tipo soberbio, cuasi asesino de su sobrino Perdix, a convertirse en un sujeto sensible, con un sueño de redención en el cual el ser al que él aprisionó resulta libre gracias a su intervención. Se puede intuir, por otro lado, alguna culpa por Ícaro, al darle al Minotauro sus alas, como señal de redención, una liberación de la culpa por la muerte de su hijo, aún si eso no fue realmente su culpa (ya saben como son estos chibolos de hoy, rebeldes y con ganas de tocar el sol).
Los originales griegos distaban de esa profundidad. Dédalo fue tan orgulloso que no pudo soportar que su sobrino lo superará, así que lo intentó matar (por suerte, el sobrino magicamente se convirtió en un ave). Por otro lado, el Minotauro era más animal que hombre y cada nueve años (aunque eso está en discusión, puesto que pudo ser anual) nueve hombres y nueve mujeres vírgenes eran ofrendados al híbrido, quien los mataba sin contemplaciones.
Tal vez Tabucchi se tomó varias libertades a la hora de reinterpretar a estos personajes, pero el artista (en general) puede deformar a gusto cualquier cosa que le apetezca (Wilde aplaudiría).
En fin, esta fue una primera parte. Ya pronto llegará la recopilación de información (prepárense para la Wikipedia) y lo demás.
¡Hasta entonces!
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